¡Porque el alquiler es demasiado alto!

Según Rent Cafe, el alquiler promedio de un apartamento de 2 habitaciones en Santa Rosa es de $ 1916 / mes. El salario de una persona tendría que ser casi tres veces el salario mínimo para poder alquilar aquí. ¡Estamos pagando demasiado de nuestros ingresos en alquiler!

 

Porque los inquilinxs están soportando de manera desproporcionada la peor parte de la pandemia de COVID-19, en términos de tasas de infección, impactos financieros y una amenaza inminente de desalojo.

 

• Los trabajadores de la industria de servicios, los trabajadores agrícolas, los trabajadores domésticos, los trabajadores de la salud y muchos más no pueden quedarse en casa durante la pandemia.

• Hay más de $ 8 millones de deuda de alquiler impaga POR MES solo en el condado de Sonoma.

• 11,400 hogares en el condado de Sonoma están en riesgo de ser desalojados una vez que expiren las protecciones contra el desalojo.

• Luchamos por una legislación que elimine la deuda, brinde apoyo financiero a los inquilinos y proporcione el equipo de protección personal adecuado y la licencia por enfermedad pagada durante la pandemia de COVID-19 .

 

Porque los inquilinxs enfrentan discriminación y acoso.

 

Los inquilinxs indocumentados, las personas de color y las personas LGBTQI + enfrentan tasas significativamente más altas de discriminación y acoso en su vivienda.

 

Porque las leyes que protegen a los inquilinxs a menudo son complejas y están plagadas de lagunas.

 

Apoyamos a los inquilinxs para que conozcan sus derechos y se defiendan a sí mismos a través de nuestro inquilinx línea directa de asesoramiento.

 

Debido a que las nuevas construcciones y los nuevos desarrollos a menudo no satisfacen las necesidades de personas de bajos y muy bajos ingresos.  

Abogamos por el desarrollo de viviendas y la inversión en viviendas que sean de propiedad y gestión de la comunidad y que puedan seguir siendo asequibles para las generaciones futuras. Visualizamos un desarrollo que no haga subir los precios, que no beneficie a las corporaciones que ya son ricas, que no acelere la gentrificación y que no desplace a las comunidades que ya se encuentran en los márgenes.